Algo muy especial tiene que esconderse tras la planta del té, capaz de seducir primero a China, India o Japón y de traspasar todas las fronteras para convertirse en la bebida nacional inglesa, hasta el punto de que hoy día solo existe una bebida más popular en el mundo que el té: el agua. El té cura y reconforta con su gama de sabores que recorren desde el paladar suave y delicado hasta el más profundo y terroso. Este libro se adentra en el mundo del té desde todas las perspectivas, pero no se queda ahí, sino que va más allá, recorriendo el pequeño universo del Rooibos y las muchas posibilidades de las infusiones de hierbas y flores. Los amantes de ese momento de paz íntima que puede otorgar una taza humeante al paladar y al espíritu, saborearán en estas páginas un catálogo de sensaciones únicas e inolvidables.