El cáncer ocasiona entre 7 y 8 millones de muertes al año en el mundo, y se estima que esta cifra puede aumentar. Ante ello, la Homeopatía ofrece tratamiento efectivo y sin efectos adversos que cura la enfermedad o mejora la calidad de vida en casos terminales.
Es importante recordar que, para la Homeopatía, toda enfermedad se relaciona con las particularidades individuales de cada paciente y no sólo con condiciones generales que marca la enfermedad. Sin duda, lo más importante para nuestro sistema médico terapéutico no es el tipo o nombre del cáncer, sino en quién se produce la enfermedad. No es lo mismo atender a un individuo con buena vitalidad y una adecuada respuesta inmunológica, en el que el medicamento logra la curación, que a otro que está debilitado, de edad avanzada, con malas condiciones de salud o nutrición inadecuada, pues todo esto se opone a un resultado exitoso.