La educación alimentaria constituye un aspecto sustantivo en la formación humana, pues permite prevenir, e incluso corregir,hábitos de consumo que se caracterizan por carencias,excesos y desequilibrios,los cuales derivan en distintos grados de desnutrición o en trastornos cronicodegenerativos; a su vez, propicia un mejor conocimiento,valoración y aprovechamiento de los recursos y de las culturas alimentarias regionales,así como mejores estados de nutrición y de calidad de vida.
Enseñar a satisfacer los requerimientos nutricios que demanda nuestro cuerpo es impulsar el desarrollo potencial e integral de cada persona;más aún en el caso de los niños, ya que el vínculo entre crecimiento,desarrollo físico y mental,capacidad de aprendizaje y nutrición es determinante. Algunas investigaciones han demostrado que, las deficiencias nutricias a temprana edad,deterioran de modo irreversible el potencial genético de los individuos.
Con el propósito de fomentar mejores hábitos para una alimentación completa,variada e higiénica, esta obra recoge el análisis que desde distintas disciplinas presentan algunos especialistas; a partir de estas perspectivas se pueden diseñar programas,estrategias y actividades de enseñanza acerca de la alimentación humana,mismos que se podrían aplicar y evaluar en distintos niveles educativos y sectores de la población.