Rosell aborda con rigor el pasado y el presente, así como los futuros posibles, de la producción y consumo de energía en el ámbito global. Constructiva y esperanzada, pero a la vez realista y firmemente apoyada en los datos y las cifras más actuales, constituye una aportación clave al gran debate de nuestro tiempo.
La energía no es un bien infinito, y su obtención dista mucho de ser sencilla. Las fuentes mayoritarias tradicionales –el carbón, el petróleo, el gas— tienen unas reservas limitadas, y crece la evidencia de que su obtención y consumo acelera el calentamiento global. Con la economía mundial inmersa en un ciclo de crecimiento sin precedentes, nuevas zonas del planeta reclaman su cuota de energía, agudizando así los problemas medioambientales y de abastecimiento. Todo ello nos conduce a plantearnos una pregunta capital, cuya respuesta ni la sociedad ni la clase política parecen querer afrontar: ¿Habrá energía suficiente para todos?