Los bebés no necesitan realizar un entrenamiento físico” pero unos sencillos ejercicios le facilitan el aprendizaje motor. Los niños aprenden jugando, por ello es muy importante que los padres o cuidadores integren esta actividad física en un entorno de diversión. Si no recurrimos al juego, alejándonos de los mecanismos de aprendizaje propios de los adultos, el niño se puede desmotivar o frustrar.
Con los 50 ejercicios sencillos y básicos que se explican en este libro, los papás pueden mejorar mucho la psicomotricidad y el desarrollo sensorial de su bebé, a través de juegos con los que también se potencia la memoria, la fuerza y agilidad, la coordinación, el equilibrio, la comprensión abstracta y la autoestima, beneficiándole tanto en la infancia como en el futuro.
Este libro esta estructurado en dos grandes apartados, relativos al desarrollo motriz y la estimulación sensorial, que a su vez están divididos por franjas de edades porque cada una de ellas presenta necesidades diferentes, Los ejercicios recomendados se desarrollan paso a paso a través de secuencias fotográficas con sus correspondientes explicaciones.