Con La tierra pródiga, Agustín Yáñez (1904-1980) enriquece su novelística sobre México; es una más de sus obras son fundamentales, y se liga profundamente a su labor social y política en la costa de Jalisco, de donde fue gobernador. En sus páginas triunfa la violencia, captada en el molde de una prosa que se significa tanto por su energía plástica como por el uso del habla popular.