Se puede decir que las primeras herramientas del hombre le deben mucho a las garras, cuernos y picos de animales mejor capacitados que él para ciertas operaciones específicas. Es probable también que los nidos de pájaro hayan sido inspiración temprana en los entramados de cestería y, mucho después, en la invención del concreto armado, así como los diques de castores inspiraron el diseños de las primeras represas artificiales. Y ¿qué decir del desarrollo de la aviación, basado en la observación del vuelo de las aves, murciélagos y otros dispositivos voladores como la semilla del arce? Este libro pretende dar cuenta de la influencia de la Naturaleza en los diseños del ser humano, a la vez que propone sistematizar un acercamiento a esta para encontrar soluciones a problemas de diseño, con base en el conocimiento de los principios constructivos que rigen forma y función en la Naturaleza. Fabricio Vanden Broeck, diseñador industrial y especialista en Biónica aplicada al diseño, relaciona el universo de las formas del Hombre, tanto las funcionales como las simbólicas, con su origen en la Naturaleza, haciéndonos conscientes de que esta es mucho más que un almacén de materias primas, y de su enorme potencial en soluciones a los problemas que el hombre enfrenta y seguirá enfrentando.