Cuando medito, conecto con el instante presente, estoy en sintonía con mi paz interior, abro mi corazón. Para meditar, no es preciso ser un iniciado. Basta con tomarse el tiempo necesario para respirar unas cuantas veces, cerrar los ojos y dejar que el cuerpo se relaje. Basta con dejarse llevar por las palabras de Arnaud Riou para, paso a paso, mediante pequeños ejercicios y meditaciones guiadas, partir al descubrimiento de la calma. Basta con dejarse acariciar por cada página, con interiorizar sus palabras, con dejarse influir por sus sensaciones, por sus dibujos y por sus colores. La meditación invita a realizar un viaje interior. Éste es mi cuaderno de bitácora.
