La urgencia de avanzar en la consolidación institucional de los sistemas y mecanismos de seguridad esta representada por la crisis de seguridad de al menos los últimos diez años al incrementarse la violencia y la delincuencia en prácticamente toda la geografía nacional; sobre todo en delitos relacionados directa o indirectamente con el narcomenudeo o el narcotráfico como lesiones, homicidios, extorsiones o cobros de derecho de piso. De tal magnitud es la inseguridad que ya desde el año 2000 se hablaba de la necesidad de articular programas, políticas y estrategias.