Si quieres volar, una amiga son tus alas.
Porque nuestras conversaciones no tienen principio ni fin.
Porque me acompañas, me aconsejas y, aveces, me irritas, (pero nos reconciliamos sólo con una sonrisa).
Porque nos divertimos, nos entendemos como nadie y nos complementamos.
Porque eres mi amiga y la amistad verdadera es para siempre.