Siro y Down son primos y cada uno es peculiar. Siro porque no deja de preguntarse por qué vuela la mosca y Down porque no se llama Down, sino Guillermo. Fuera de eso, tienen muchas cosas en común: uno de ellos cuenta ovejas saltarinas para dormir, el otro cuenta flores, y qué mejor si son margaritas azules. Son bonitas y dan más sueño que las ovejas. En algunos aspectos sí que son distintos; por ejemplo, Siro tiene los ojos de almendra y Down tan rasgados que parece un chino, pero eso es muy poquita cosa porque gente hay de todo tipo; lo importante para estos primos es que cuando están juntos se divierten como locos, se echan la mano y son muy buenos para oírse uno al otro. Esta es la historia, dulce y ocurrente, de una gran pareja, que nos mostrará que es posible trabajar juntos y ser felices sin importar las capacidades diferentes, incluso ayudar a los grandes y buscarle un tornillo a quien lo ha perdido. ¿ Quién no querría tener un amigo como ellos?