Con la intención de tener un material de apoyo que introdujera a sus estudiantes en los temas básicos y generales de criminología, Orellana Wiarco publicó Manual de criminología en 1978, que resultó ser la primera obra sobre la materia escrita por un mexicano. Al paso del tiempo han surgido corrientes sobre criminología moderna y contemporánea, cuyo estudio en México es casi nulo. Por tal motivo, el autor analiza en este trabajo, de manera ágil, sencilla y clara, la postura interaccionista, calificada como moderna, y la nueva criminología, para completar su tratado anterior sobre criminología tradicional con los preceptos contemporáneos.
El libro se divide en cuatro partes. En la primera parte se retorna el carácter científico de la criminología y su importancia en el control social; se abordan los mecanismos de control social, tanto formales como informales, pilares en la explicación de la criminalidad, y cómo se efectúan según las posturas criminológicas, conservadoras o las que se aplican en las sociedades en conflicto permanente; y se exponen las facetas más importantes de la criminología tradicional o clásica. La segunda parte se centra en lo que se ha calificado como criminología moderna, basada en el interaccionismo simbólico criminológico; en la revisión de la escuela de Fráncfort y los conceptos marxistas, antecedentes de la llamada criminología crítica; y en las corrientes reduccionistas, entre las que se encuentran el idealismo de izquierda, la nueva criminología administrativa, el realismo de derecha y el derecho penal mínimo o minimalista, así como en la corriente abolicionista en sus vertientes de abolicionismo de justicia participativa y justicia representativa, el abolicionismo penal radical y el derecho administrativo sancionatorio o cuarto enfoque criminológico. La tercera parte se enfoca en la criminología clínica, la política criminal y el Derecho Penal, y también incluye el tema de la justicia restaurativa. En la cuarta y última parte se dan a conocer diversas cuestiones de relevancia para la investigación criminológica: la teoría del delincuente nato, de Lombroso; los sustitutivos penales, de Ferri; el magnicidio de León Trotski; el sistema de ventanas rotas y tolerancia cero; el perfil criminológico del asesino serial; el proyecto nacional Ciudades seguras; la Convención de Palermo, y la Falcone Check List, entre otras.
