El aparato dental realiza la función activa de la masticación, contribuye al mecanismo del habla y sirve para conservar un aspecto agradable. La dentición humana es heterogénea: comprende incisivo, caninos, premolares y molares, los cuales difieren marcadamente en su forma y se adaptan a las funciones masticatorias especializadas de incisión, presión y trituración. El hombre ha sido dotado de dos dentaduras. La primera se conoce con el nombre de dentadura temporal o decidua, debido a que se pierde totalmente entre los diez y los doce años de edad; la segunda, que tiene que servir para el resto de la vida, se denomina dentadura permanente. Los términos dientes infantiles y dientes de adulto son sinónimos de los anteriores en el uso común, pero se prestan a errores, pues todos los permanentes, con excepción de cuatro, funcionan ya en la pubertad o antes de ella.