Si fue difícil explicar cómo se genera una Factura Electrónica, por ser un acto que no se puede ver ni tocar, algo como un acto de FE; ahora imagínese lo complicado que resulta verificar la validez de ese acto de FE.
Es como demostrar que Dios existe, y créame, aun eso no resulta complicado cuando recibo ayuda de allá arriba.
Hay cosas que la vista no evidencia, pero si comenzamos a conocer los procesos que dan seguridad a los nuevos comprobantes, empezaremos a verlos de otra forma, y hasta a reconocer cuando no tengan el valor fiscal necesario para efectuar la deducción.
Simplemente hágase la siguiente pregunta: ¿pagaría una factura sin verificar si es válida?
La función de un asesor es brindar tranquilidad, por lo que en esta obra encontrará los elementos para prevenir, en lugar de remediar.