No hay fórmulas mágicas, matemáticas o milagrosas para lograr el desarrollo sustentable, entendiendo como crecer, crear empleos y bienestar sin destruir el entorno ecológico. Hay factores climáticos, más allá de la voluntad del ser humano, que durante siglos determinaron el atraso o el progreso de las naciones. El mapa del mundo parecía indicar el desarrollo sustentable no dependía de las decisiones de los seres humanos sino de la ubicación geográfica. La principal tesis de este libro es que actualmente el factor geográfico ya no es determinante para el desarrollo sustentable, sino más bien el clima jurídico, es decir, las leyes norman la convivencia social. Si hay leyes que protejan los derechos de propiedad y los garanticen institucionalmente, habrá crecimiento, preservando el entorno ecológico, aun en climas tropicales y extremosos. Si las leyes debilitan y violentan los derechos de propiedad, no habrá crecimiento sostenido ni sustentable, incluso en zonas con climas templados y benignos. En este libro analizaremos los derechos que las leyes deben garantizar, así como las legislaciones que deben institucionalizarse, para lograr tan ansiado desarrollo sustentable.