En este libro se analizan los antecedentes, causas, origen, desarrollo, consecuencias, y fin de la reforma agraria en México.
Se trata de una obra polémica que cuestiona los mitos que rodearon el proceso y; señala que hubo reparto agrario desde el porfiriato; explica que los campesinos perdieron la revolución y que el Estadomexicano les impuso una peculiar forma de tenencia de la tierra: el ejido, como una forma de control político; muestra que Zapatistas y Villistas lucharon por tierra en propiedad privada; expone como Estados Unidos estaba interesado en que se desarrollara una reforma agraria al sur de su frontera; plantea que ésta fue llevada a cabo por Lázaro Cárdenas en aparente contradicción, ya que durante su carrera militar combatió a los ejércitos campesinos de Villa y Zapata; que la reforma agraria tuvo como fines primordiales conformar un sector agropecuario que pudiera servir de apoyo al proceso de industrialización y desarticular al movimiento campesino; afirma que nunca hubo contrarreforma agraria; que el ejido siempre fue una modalidad, con limitaciones, de propiedad privada, y que el gobierno se aseguró siempre de que la inmensa mayoría de los ejidatarios carecieran de sus títulos de propiedad; que la reforma agraria fue contrainsurgente, minifundista y creadora de un amplio semiproletariado agrícola; que condenó al atraso a la actividad forestal y a la ganadería; y que llevó a un uso inadecuado de inmensas porciones del territorio nacional y a la erosión y desertización.