Los principios en que se basan las enseñanzas de Krishnamurti son pocos y simples. Quizás por ello sus palabras generaron tantas confusiones entre quienes las interpretaron. Frases como la verdad está en lo que es; uno es el mundo; el observador es lo observado; hay que conocerse a sí mismo; etc. Repiten a lo largo de sus charlas; ya que su obra publicada está compuesta mayoritariamente por sus conferencias. Leyendo los libros de Krishnamurti se puede acceder a sus ocasionales auditorios. En ellos es fácil advertir la necesidad que tenía de repetir una y otra vez sus palabras y la manera en que éstas chocaban contra las barreras del conocimiento y la educación de las presentes. Sus enseñanzas se basan; fundamentalmente; en el funcionamiento de la mente del hombre. Conocer a Krishnamurti es descubrir uno de los pensamientos más trascendentes de nuestro tiempo.