Con esta serie, alumnos, profesores y padres de familia se darán cuenta de que la ortografía puede ser fácil y agradable, gracias a que se aprende de forma práctica por medio de divertidas actividades como crucigramas, sopas de letras, trabalenguas, chistes y amenas lecturas propias para cada tema. A través de un método inductivo-reflexivo, el alumno primero aplica la ortografía; posteriormente, el conejo Pok, un juguetón personaje, explica las reglas ortográficas de modo sencillo para reforzar lo aprendido. Así, en los primeros grados se interiorizan las reglas para que el alumno vaya construyendo sus propios conocimientos ortográficos y en los grados posteriores estas reglas se especifican formalmente, una vez que los alumnos ya las tienen asimiladas.