En su libro titulado El Deslinde dice Alfonso Reyes: en el Robinson literairo a la manera de Daniel De Foe, el hombre ya estructurado por la cultura se ve de pronto desposeído y en mitad dela naturaleza. Nuevo Adán, cada cosa le parece un asombro, y el espectáculo natural otra vez se le ilumina con los encantos de un paraíso. En efecto, y como ya hice notar en el prólogo a Dos años de vacaciones( número 189 de esta colección sepan cuantos) despúes de un naufragio que no es sino el símbolo del rompimiento con la civilización, el arribo a una isla desierta que a su turno viene a ser el Paraíso recobrado, representa al parecer para muchos la única salida posible a la encrucijada en que sienten perdidos.