Refiriéndose al gobierno del Doctor Francia, en 1843, se asombraba ya Thomas Carlyle de que un simple particular macilento, practicante de derecho y doctor en teología, hubiese podido ser el dictador vitalicio de un país de nuestro continente. Lo que no podía advertir el historiador inglés, en su época, era que el Doctor Francia, trascendiendo su propia aventura, había instaurado entre nosotros un método de gobierno cuyos recursos, multiplicados al infinito, son los que siguen rigiendo hoy la vida política de muchas naciones latinoamericanas. De ahí el título de Recurso del método dado a esta novela que se desarrolla en un país del continente que viene a ser una summa geográfica del menos cartesiano de los mundos posibles.
Tirano ilustrado es, por ello, el personaje central de esta obra de Alejo Carpentier, que viene a sumarse al ciclo de sus novelas americanas de lo real maravilloso. Y aunque su acción se extiende sobre un lapso de quince años, claramente situado en la historia de este siglo, el personaje, por su omnipresencia en el continente, rompe con su propia cronología situándose, a la vez, antes y después de la época en que lo hace vivir el autor. El personaje construido por Alejo Carpentier es, en realidad, un montaje de elementos que han caracterizado a numerosas dictaduras latinoamericanas del pasado y del presente. En su evocación desafortunadamente, cada buen conocedor de nuestra historia podrá señalar su procedencia.