El Principito, con sus relatos infantiles sencillos y llenos de ternura, es un mensaje de humanidad maravilloso.
En este libro se encuentra un trasfondo moral tan profundo que, en medio de la fantasía, conmueve y obliga a la meditación, porque se ocupa de los valores del ser humano.
Por otra parte, dentro de las diversas situaciones descritas se plantean razonamientos de lógica incontrastable.
En fin, El Principito es universal y constituye, sin lugar a duda, una importante aportación a las grandes obras de literatura juvenil de todos los tiempos.