La terapia de abrazo es una técnica simple y notablemente eficaz que hará a tu hijo más feliz, más cooperativo y menos demandante: acabará con los problemas de conducta. Al equilibrar los sistemas bioquímicos del cerebro del menor, estos alcanzan un nivel óptimo para el aprendizaje y el desarrollo emocional. Puede incluso sanar el autismo profundo. Provoca cambios importantes en la manera como te relacionas con tu hijo, hija –y lamanera como se relaciona contigo.