El razonamiento complejo es una herramienta fundamental para todos los campos disciplinarios y para la vida, porque nos ayuda a enlazar varios elementos, fortalece habilidades y competencias de: decodificación de información, interpretación de fenómenos a partir de situaciones, construcción de soluciones a través de la modelación e interpretación de fenómenos a partir de representaciones.
Este conocimiento de vanguardia queda muy bien plasmado en el libro, Razonamiento complejo de Carlos Zarzar Charur, basado en competencias, que está estructurado en cuatro unidades: Unidad I. Heurística; Unidad II. Pensamiento simbólico; Unidad III. Pensamiento divergente, así como Unidad IV. Solución de problemas. El modelo didáctico comprende 3 niveles: presentación y definición del problema, búsqueda, evaluación y análisis de información, así como planteamiento y presentación de la solución.
Incluye un gran número de lecturas de apoyo, las cuales servirán para profundizar en los temas propios de cada unidad y presenta gran cantidad de actividades y ejercicios, incluso problemas que vienen en el examen PISA (Programme for International Student Assessment) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Además, cada unidad cuenta con un esquema de verificación de la calidad: una rúbrica de autoevaluación y una guía para la coevaluación o evaluación coparticipativa, por medio del trabajo en equipos.