Hay novelas que parecen leyendas, y la historia de las dos ancianas que vivieron en las heladas tierras de Alaska tiene
el sabor de esas antiguas enseñanzas que los hijos reciben de boca de sus padres en las largas noches de invierno… Erase una vez dos ancianas que fueron abandondas y condenadas a morir de frío e inanición. Tras el desconcierto inicial, el espíritu de supervivencia se impuso y, olvidados sus achaques, las dos decidieron luchar para vencer la muerte. Así descubrieron cualidades que les permitieron salvar la vida y saberse mejores frente a sí mismas y frente a los demás. Con palabras sencillas, Velma Wallis nos entrega una fábula que viene del frío pero conserva la calidez de un mensaje espiritual que busca y encuentra amor en los gestos más humildes y en las voces más sinceras.
Este libro, a pesar de ser un clásico de la espiritualidad, lleva diez años descatalogado. Vendió más de 40.000 ejemplares en nuestras ediciones de los años noventa.