Con su primera y más célebre novela, El señor de las moscas., William Golding dio ya sobradas muestras del talento literario que le llevaría en 1983 a obtener el Premio Nóbel de Literatura. Como consecuencia de un naufragio, una treintena de adolescentes se ven obligados a organizar su existencia en una isla desierta. Esta es la situación que sirve de punto de partida a una sobrecogedora fábula moral sobre la condición humana. Nos encontramos ante una portentosa novela que ilustra la agresividad criminal latente en el ser humano, pero también ante una requisitoria moral contra los riesgos de una educación represiva. Es esta riqueza temática, unida a un impecable estilo narrativo, lo que convierte El señor de las moscas en uno de los clásicos contemporáneos más vivos. Una novela bella, trágica, provocativa. E.M. Forster