La programación orientada a objetos (POO) es una de las técnicas más modernas de desarrollo que trata de disminuir el coste del software, aumentando la eficiencia y reduciendo el tiempo de espera. Por eso, donde la POO toma verdadera ventaja es en el poder compartir y reutilizar el código.
Sin embargo, no debe pensarse que esta forma de programación resuelve todos los problemas de desarrollo de una forma sencilla y rápida. Para conseguir buenos resultados, es preciso dedicar un tiempo mayor al análisis y al diseño, pero no será un tiempo perdido, ya que redundará en el empleado para la realización de aplicaciones futuras.
Existen varios lenguajes que permiten escribir un programa orientado a objetos; entre ellos hemos elegido C++. ¿Por qué C++? Porque posee características superiores a otros lenguajes. Las más importantes son programación modular y orientada a objetos, portabilidad, brevedad, compatibilidad con C y velocidad.
Además, se trata de un lenguaje de programación estandarizado (ISO/IEC), ampliamente difundido, y con una biblioteca estándar C++ que lo ha convertido en un lenguaje universal, de propósito general, y ampliamente utilizado tanto en el ámbito profesional como en el educativo.