Tres hombres y una mujer llegan a un pueblo buscando
a Simón el panadero para vengar una afrenta. Una vez que dan con la panadería, balacean a Simón, incendian
el establecimiento y se van. Sobreviviente, el panadero identificará más tarde ante el Ministerio Público a Serafina, una madrota que había sido
su amante. Pero ambos son acusados de haber llevado
a cabo una inhumación clandestina; confirmado este dato, se empieza a descubir una historia siniestra, que involucra a una serie de muertes de las que resultan responsables Serafina y su hermana Arcángela 8aladro, conocidas en la vida real como las Poquianchis.