Todos estamos íntegramente dotados para cumplir nuestro plan divino, pero primero debemos erradicar de nuestra mente las dudas, los miedos, las criticas y los oídos, que son nuestros reales enemigos, y tener fe en que podemos permanecer por encima de todas las situaciones desfavorables que la vida nos presenta sintiéndonos felices de ser nosotros mismos, dejando libre a la razón, confiando en la Ley Espiritual y usando las palabras precisas. En el poder de la palabra hablada, Scovel Shinn nos dice que la vida es como un crucigrama en el que solo hay una palabra correcta que nos da la respuesta; Así que si nos olvidamos de los pensamientos negativos y los convertimos en ideas perfectas, todo nos será dado.