El proyecto Habilidades para la vida conduce a los niños a descubrir su potencial, identificar las barreras psicosociales —obstáculos que limitan la identificación de alternativas y oportunidades para tomar decisiones y actuar de acuerdo con sus necesidades e intereses personales—, y a sobreponerse a ellas. Estas barreras, que incluyen normas sociales restrictivas, miedos, resentimientos, vergüenza, prejuicios, culpa y la percepción de que el control de la vida debe estar fuera de sí mismo, a menudo se dan por la presión externa para guardar las apariencias y cumplir con las normas sociales percibidas.